A pesar de que todos los perros precisan los mismos cuidados básicos, como puede ser su alimentación, la higiene, el entrenamiento, los juegos, y por supuesto el afecto, es recomendable que éstos sean adaptados según la raza del animal, debido a que las distintas características que puedan tener, así lo requerirán.
Tal es el caso del Yorkshire Terrier, el cual es una raza de perro con varios aspectos físicos y personales bastante particulares, que al ser atendidos de manera apropiada y dedicada, fácilmente se podrá notar en la calidad de vida plena y satisfactoria que gozará la mascota.
Pero para ello será necesario conocer mejor la raza Yorkshire, lo cual hoy en día es muy fácil gracias a los sitios webs especializados en dicha raza, donde se puede aprender sobre los orígenes, sus características físicas y de carácter, los tipos de Yorkie que existen, cómo educarlos, los cuidados que se le deben dar, y muchos temas más.
De este modo, las personas que tienen o deseen tener un pequeño Yorkshire como mejor amigo, podrán saber todos los secretos al respecto de esta amigable raza y así tener una vida feliz juntos. En este sentido, daremos unos consejos que pueden ayudar a ser el mejor dueño de un Yorkshire Terrier.
Cuidar la alimentación
El alimento para todos los perros es el pienso, por lo tanto, hoy en día en el mercado se pueden encontrar marcas que tienen piensos formulados especialmente para los perros de razas pequeñas, como por ejemplo el Yorkshire Terrier.
Una vez elegido el pienso para la mascota, habrá que prestarle especial atención a las porciones a suministrar, cuidando entonces que sea suficiente para que cubra los requerimientos nutricionales, pero que no sea tan excesiva como para causar sobrepeso al animal.
De este modo, lo ideal sería seguir las indicaciones que se mencionan en el empaquetado del pienso, o mejor aún, seguir las recomendaciones del médico veterinario, ya que podrá determinar las cantidades correctas al considerar aspectos como el peso, estatura y nivel de actividad física que tenga el can.
Hábitos de aseo e higiene
Para que el Yorkshire pueda gozar de buen bienestar, habrá que velar mucho por los hábitos de aseo e higiene que el mismo conlleva, debido a sus características físicas. Para empezar, su larga cabellera, además de necesitar ser lavada al menos dos veces al mes, es fundamental cepillarla a diario, no solo para evitar la formación de nudos, sino también para que conserve el brillo natural que posee.
Asimismo, es importante recortar los pelos que vayan creciendo en la zona de la cabeza y la cara, pues éstos se pueden introducir en los ojos del perro, lo cual les incomoda y les dificulta la visión. De igual modo, esta raza tiende a segregar muchas legañas, por lo que será necesario limpiarle los ojos frecuentemente.
Por otra parte, las razas de perros pequeñas suelen tener dentaduras delicadas, propensas a la formación de sarro. En este sentido, es bueno acostumbrar al perro desde cachorro al proceso de cepillado dental, con una pasta especial de uso veterinario.
Evitar problemas de salud
Es importante recordar que el Yorkshire Terrier, siendo una de las razas caninas más pequeñas que existen en el mundo, tiene una estructura ósea más frágil que la de otros perros. En vista de ello, el dueño debe procurar que el perro no reciba golpes fuertes o sufra caídas bruscas que puedan causar lesiones o fracturas de los huesos.
Finalmente, durante las temporadas de climas fríos, es bueno mantenerlos en un entorno cálido o abrigados, para evitar el desarrollo de bronquitis o enfermedades respiratorias.