Los interesados coinciden en que quieren saber sobre el futuro, acerca de su entorno familiar, del trabajo, y muchas veces del destino que le toca en esta vida. Son temas de la futurología y, por lo tanto, compromete los oficios de los videntes.
Las cartas están echadas
Para cada uno de los casos funcionan las cartas de Tarot de una manera en que la clarividencia se expresa a través de los arcanos. En tarotportarjeta.com, por ejemplo, es posible acceder a una orientación sobre estos temas: toda una complejidad en la que se expresa la personalidad y el devenir de quien consulta.
Como bien es sabido en la vida hay situaciones que pueden escapar del control de las personas. Tomando en consideración esta afirmación, ocurren momentos en los que la escasez oprime y no se sabe qué hacer o cómo responder.
También puede ser que se registren otros casos en los que la posesión de bienes en demasía trae consigo complicaciones indeseadas. Estas emociones encontradas pueden atrapar los sentimientos de amor, asuntos de trabajo, dinero, creatividad y la producción en general de cualquier bien.
El desorden de la vida puede degenerar inevitablemente en un desequilibrio y en consecuencia, el caos tomará las riendas del destino personal. He aquí cómo la madeja comienza a enredarse y se manifiesta en el desamor, la ira o algún elemento tóxico que desencadena malestar y, en último término, enfermedad.
Se ha comprobado que este cuadro que contagia a gran parte de la sociedad, viene acompañado por una sensación de estrés y de una indefinición ante el presente y el futuro. La gran pregunta vuelve a ser la misma: ¿qué se puede hacer?
Sobre el nuevo orden personal
La búsqueda de un orden significa renacer en el caos. Lo cual indica superar una situación negativa que se ha de aprender para no se vuelva a repetir. También es importante proponerse alcanzar el equilibrio y darle un sentido a lo que se quiere, centrándose en los objetivos y teniendo confianza y fe.
Pero no todos cuentan con las herramientas para encontrar una salida frente a una embarazosa situación. La confusión necesita de la debida orientación, y la oscuridad demanda claridad. Es el momento entonces de aspirar a un estado en que la persona encuentre una solución.
En estos casos las cartas de Tarot pueden ser de utilidad. Las inquietudes, que son la manera como se expresan los problemas, se hacen conscientes. El rol del vidente es darle lectura a lo que dictan los arcanos y arrojar luces para que lo que subyace en el inconsciente brote y pueda transformarse.
Consultando el Tarot
Según los videntes y futurólogos que hacen uso de las cartas de Tarot, lo más importante en la persona que expone a la consulta sus interrogantes, es el restablecimiento de la consciencia sobre sí mismo. Y es, precisamente, por medio de esta vía que se hace posible lograr el bienestar.
El reconocimiento de las capacidades personales, una vez que se han realizado la respectiva consulta y el oráculo ha transmitido su orientación, se debe convertir en una herramienta para una condición personal distinta. El potencial personal congenia con una nueva actitud en forma consciente.
La consulta puede realizarse de manera presencial o por un contacto telefónico. Para cada caso el vidente tendrá la capacidad de hacer saber cuál es el guión de vida de la persona, con el propósito de propugnar el orden y superar el caos que ha gobernado hasta ahora.
Lo que depara este intercambio con el oráculo es que el consultante pueda aceptar lo que le ocurre, y comenzar de manera consciente a cambiar su realidad y mejorarla.
Por lo tanto, el papel de los profesionales en la materia es interpretar las respuestas de los arcanos y proponer un orden. Y en este proceso participa con todo su ser aquél que busca ayuda. A partir del nuevo estado de consciencia podrá iniciar la construcción amorosa de su vida.