Demasiado estrés puede ser perjudicial para ti. Puede afectar tanto a la salud física como a la mental. También es algo extremadamente personal: diferentes personas viven situaciones estresantes diversas y también encuentran que diferentes formas de afrontarlas pueden ser más o menos útiles para ellas.
Una de las áreas del cuerpo más afectadas por el estrés es el tracto digestivo, ya que es capaz de desarrollar molestias estomacales y esto puede llegar a afectar significativamente tú día a día. Y así como esta, también hay otras afecciones que pueden ir apareciendo como producto del estrés a largo plazo. Por lo tanto, es útil conocer una amplia gama de herramientas y técnicas para controlar el estrés.
Identificar tus desencadenantes de estrés personales
Todos tenemos situaciones o personas particulares que nos estresan más. Algunas de estas son fácilmente identificables y pueden evitarse. Sin embargo, a veces el estrés puede acumularse con el tiempo y ser el resultado de una serie de incidentes o eventos, en lugar de un desencadenante único.
Por lo tanto, puede resultar útil llevar un diario de estrés durante algunas semanas para ayudarte a identificar qué te estresa. Esto facilitará la adopción de medidas para abordar tus niveles de estrés.
El manejo del tiempo
A veces, todos nos sentimos abrumados por nuestra lista de «cosas por hacer» y esta es una causa común de estrés. Acepta que no puedes hacer todo a la vez y empieza a priorizar tus tareas y reserva tiempo para cada una.
Haz una lista de todas las cosas que necesitas hacer y enuméralas en orden de prioridad genuina. Ten en cuenta las tareas que debes realizar personalmente y las que se pueden delegar en otras personas.
Tómate un tiempo para divertirte y relajarte
Es importante incluir tiempo para la diversión y la relajación en tu horario. Estos son importantes para ayudarte a sentirte bien en general y, a su vez, reducen el estrés y te mantienen saludable. Tener ganas de hacer las cosas que disfrutas y que te brindan placer ayuda cuando tienes que lidiar con aspectos menos agradables de la vida.
Sin embargo, si eres un trabajador compulsivo, tomarte un tiempo para relajarte y disfrutar podría parecerte una “mala decisión”. Pero, es importante recordar que tú y tu salud sois importantes. No debes ignorar tu salud física y mental en favor de actividades más urgentes.
Si incluye conscientemente actividades relajantes o divertidas y piensas en esto como una forma de mantenerte sano y capaz de trabajar bien, es probable que lo sientas como algo mucho más positivo.
Evita la cafeína y el alcohol
No se recomienda consumir demasiada cafeína y alcohol como forma de evitar el estrés. Si ya te siente estresado, esto se vuelve aún más importante. La cafeína y la nicotina son estimulantes y, por lo tanto, aumentarán tu nivel de estrés en lugar de reducirlo.
El consumo de alcohol como una forma de aliviar el estrés no es útil en última instancia.
Cambia las bebidas alcohólicas y con cafeína por agua, tés de hierbas o jugos de frutas naturales diluidos y trata de mantenerte hidratado.
Sé realista acerca de tus capacidades
Es útil recordar que la mayoría de las personas subestiman el tiempo que les llevará hacer algo y sobreestiman cuánto pueden hacer. Esto significa que terminan asumiendo demasiado y luego no cumplen. Desarrolla el simple hábito de duplicar tus estimaciones de tiempo para cualquier tarea.
Entonces, es mucho más probable que prometas menos y cumpla más. Esto hará que todos, incluyéndote, sean mucho más felices y satisfechos.
Dormir la cantidad suficiente
La falta de sueño es una causa importante de estrés y el sueño también se ve afectado por el estrés, esto crea un círculo vicioso.
Trata de adoptar una buena rutina de sueño. Por ejemplo, asegúrate de que tu habitación sea un oasis de tranquilidad sin recordatorios de las cosas que te causan estrés. Evita la cafeína durante la noche, así como el exceso de alcohol dado que esto provoca trastornos del sueño.