Todos los futuros compradores de una cabaña de madera, ya sea para el jardín o para otro lugar, deben interesarse por dos aspectos fundamentales antes de realizar dicha compra: qué modelo elegir y cómo realizar un correcto mantenimiento.
La elección de una cabaña de madera
Para elegir la cabaña de madera adecuada, hay que tener en cuenta algunos elementos, sobre todo en cuanto al tipo de madera y a su tratamiento.
Para que una construcción sea sólida, se requiere una anchura mínima de los tablones utilizados. Por regla general, las cabañas prefabricadas para un modelo de 20 m² cuentan con tablones de 44 mm de grosor. Sin embargo, algunos fabricantes pueden procesar la madera hasta un grosor de 200 mm, lo que en principio se recomienda para casas de campo de 50 m² o más. Uno de los fabricantes más conocidos es Pineca, así que echa un vistazo a sus cabañas prefabricadas de madera.
En cuanto al tipo, la madera de pino es la variedad preferida, ya que tiene una textura muy densa y es extremadamente fácil de trabajar. Por otra parte, la conservación de la madera requiere precauciones especiales para que la casa mantenga su mejor estado con el paso de los años. La aplicación de aceites específicos protege la madera contra los efectos de la decoloración o el envejecimiento durante unos dos años. Algunas pinturas pueden mantener la madera en buen estado durante incluso dos décadas.
El correcto mantenimiento de las cabañas de madera
Para conservar el aspecto estético y la solidez de las cabañas de madera, es necesario realizar ciertas acciones tanto antes del montaje como durante su uso. Así, antes de montar la cabaña de madera, es recomendable preparar el terreno. Por ejemplo, una fina capa de hormigón evitará que la humedad llegue a la madera.
Lo primero que hay que hacer antes del montaje es desengrasar y lijar la madera para que el barniz se mantenga. A continuación, se recomienda aplicar una generosa capa de insecticida, fungicida y antitermitas. Puedes encontrar un producto 3en1 para este paso.
En cuanto al barniz, lo ideal es aplicar 3 capas, la primera de ellas antes del montaje de la cabaña.
En lo que concierne al mantenimiento una vez montada la cabaña de madera, se recomienda aplicar una capa de barniz con regularidad. Presta atención a quitar el polvo antes de aplicarla. La regularidad dependerá del barniz utilizado: mientras que un barniz de recubrimiento protege la madera durante más tiempo (unos 4 años), otro más transparente debería renovarse cada 2 años. Antes de decantarte por uno u otro, ten en cuenta que cuanto más transparente sea, más natural se verá la madera de la cabaña.
Por último, airea la cabaña con regularidad para evitar olores rancios y ayudar a la salud de la madera, y engrasa las bisagras de las puertas y ventanas. No te olvides de limpiar el techo y quitar restos de plantas y el musgo que pueda haber aparecido debido a la humedad que queda tras los días de lluvia.