Para llevar a cabo, tanto proyectos personales como profesionales, que hagan uso de tipografías, es importante saber elegir aquellas que están libres de derechos. Existen muchas alternativas en la actualidad que se amoldan a cualquier gusto y a las que es posible acceder con gran facilidad.
Las tipografías se definen como el conjunto de letras que forman parte de un modelo de abecedario. Estas son utilizadas en cualquier tipo de texto y son pieza clave a la hora de elaborar publicidad. El problema está cuando no se tienen conocimientos sobre las tipografías que pueden usarse sin problemas y aquellas que están amparadas bajo derechos de autor. La verdad es que utilizar fuentes gratuitas tiene muchas ventajas y a continuación veremos algunas.
Gran variedad de opciones
El hecho de que sean de modalidad gratuita no quiere decir que sean limitadas. Al contrario, las tipografías que se pueden utilizar con libertad, sin prestar atención a los derechos de autor, son numerosas y se adaptan a todas las necesidades. El detalle está en saber dónde buscar para elegir las correctas.
Por ejemplo, en tipografía para publicidad tenemos opciones como:
- Diseños en blanco y negro con Black Out, que está especialmente pensada para titulares que busquen crear un gran impacto. Y aunque la base es en blanco y negro, siempre se podrán aplicar las variaciones que se deseen, para generar más valor o adaptarse al diseño propio de la publicidad.
- Diseños especiales para ofertas con la tipografía League Spartan. Es una de las familias más completas que existen en esta materia, contando con la significativa cantidad de 562 opciones. Al tener libertad de actuación con los derechos de autor, es posible que cualquier diseñador que lo desee, incluya nuevos opciones y pueda ampliarla así aún más.
- Diseños de displays publicitarios con la tipografía Sniglet. Esta es una de las más utilizadas para este fin, porque es una fuente amigable y con bordes redondeados, que se adapta bien a cualquier tipo de mensaje. En general, la imagen que proyecta es como de burbujas sobre el formato a utilizar.
Sin problemas de tipo legal
Las acciones bien hechas dejarán de lado los quebraderos de cabeza asociados con problemas legales y eso es justo lo que nadie desea para su marca solo por utilizar una tipografía que no estaba libre para el uso de cualquier persona. Este es un tema muy serio y podría generar incluso el pago de grandes sumas de dinero, por lo que hay que estar muy atentos.
La mejor forma de asegurar que la fuente esté libre de derechos de autor, es realizando consultas a especialistas en la materia, como por ejemplo acudir a Roc21. Es un blog enfocado en tratar temas de diseño gráfico, que se mantiene al día en todo lo que involucra a esta materia para compartir con las personas que están interesadas en ello.
Uno de los artículos más interesantes que tienen está enfocado en las fuentes caligráficas modernas, las cuales permiten crear campañas publicitarias atractivas y especiales para un público objetivo definido. En ocasiones, este tipo de fuentes tienen un precio específico (que suele ser bajo), porque requieren mucho esfuerzo por parte del diseñador y merece alguna recompensa.
Descarga fácil
Lo mejor de las fuentes gratuitas es que se pueden conseguir en muchos bancos de internet que permiten descargarlas sin mayores problemas. Estas después se pueden incluir como parte de las fuentes propias del ordenador y así se utilizan con total normalidad en las actividades diarias.
Si existe alguna duda en cualquiera de estos procedimientos, lo más recomendable es consultar con algún experto o visualizar algún vídeo que informe sobre la manera correcta de hacerlo. De esta manera, se realizará todo sin inconvenientes.
Adaptación de mensajes
Después de tener las fuentes descargadas e instaladas en el ordenador, será posible trabajar con ellas con normalidad, como con cualquier otra fuente que esté incluida dentro de los programas de edición. Esto permite que los mensajes sean adaptados a las características propias de las fuentes y así ir valorando cuál es la que mejor responde a los objetivos de diseño.
Cuando se tienen disponibles varios tipos de fuentes es más fácil el trabajo, porque se pueden aplicar cambios entre una y otra, y así ir obteniendo lo deseado. Además, con varios tipos de fuentes, será posible ir realizando mezclas que logren un mayor impacto en el resultado final.
¿Cómo reconocer si una tipografía está libre de derechos?
Ya que conocemos todas las ventajas, nos queda ahora la tarea de reconocer cuándo una tipografía está libre para ser utilizada. El mayor problema con internet, es que muchas veces se publican tipografías con las que no se tiene claridad total sobre este tema, por lo que se pueden generar problemas al final, cuando se realizan las publicaciones.
Para evitarlos, lo mejor es utilizar como base de descarga un sitio web que sea de confianza y donde esté claramente definido el tipo de fuente que se trata. En caso de dudas, es mejor no utilizar la fuente o, mejor aún, apostar por algún paquete de pago que tenga un precio que pueda ser soportado por las finanzas del negocio.
También hay que prestar atención a las fechas en que caducan las posibilidades de uso. Aunque no es muy habitual, existe la posibilidad de que un autor permita el uso de una fuente por un determinado plazo de tiempo, pero después exija un pago por la misma.
Por último, es necesario estar alerta con los profesionales del diseño que se contraten para realizar campañas publicitarias. Normalmente, los dueños de negocios no tienen conocimiento de estos problemas asociados con las fuentes, por lo que pueden caer en conflictos sin necesidad, al trabajar con personas que no tienen claro lo que pueden usar o no.
El uso de tipografías libres de derechos tiene muchas ventajas, sobre todo cuando se está iniciando en el mundo de la publicidad. Sin embargo, a medida que una marca adquiere más valor comercial, lo mejor es apostar por tipografías propias.