Post actualizado en Enero de 2022 con nuevos datos.
A pesar de la incertidumbre en la economía española y mundial, el panorama startup aún parece prometedor. Es que este tipo de empresas se caracterizan por ser muy flexibles frente a las adversidades gracias a su innovación y a las nuevas tecnologías que emplea.
Y en una época marcada por el distanciamiento y la pérdida de lo presencial, las startups encontraron su terreno fértil para crecer más que nunca. Entre las industrias en las que más proliferan las startups actualmente encontramos: fintech, e-commerce, insurtech, los neobancos como Qonto, Revolut o N26, agencias de linkbuilding, biotech, proptech, entre otras.
¿Dónde surgen la mayoría de las startups?
A pesar de que España nunca ha liderado el ranking tecnológico en Europa, sí es verdad que es un país con muchas iniciativas emprendedoras y que poco a poco va ganando su lugar en el mundo de las startups.
Según un estudio de Startup Heatmap Europe, Berlín, Londres, Amsterdam y Barcelona son valoradas como las mejores ciudades para desarrollar una startup. Y en el listado de 50 ciudades de este mismo estudio, también se encuentran otras ciudades españolas como Madrid (puesto 13), Palma de Mallorca (40), Bilbao (41) y Valencia (42).
Lejos está de grandes nombres como Alemania o Inglaterra, pero lo cierto es que en España contamos con 2 ciudades consideradas tech hubs que están cambiando el panorama de las startups en toda la UE.
Barcelona y Madrid son 2 de las ciudades más elegidas por las startup españolas y también profesionales de toda la Unión Europea para comenzar sus actividades. Cada ciudad responde a necesidades y perfiles muy distintos, de acuerdo a sus conexiones, posibilidades de financiación, regulaciones y cultura emprendedora.
Barcelona, la preferida por nacionales y extranjeros
Un 65% de los creadores de startups en Barcelona son extranjeros, y es que esta ciudad es una de las favoritas para crear y desarrollar estas empresas año tras año. En el estudio de Startup Heatmap Europe, Barcelona ocupa el cuarto lugar por tercer año consecutivo, demostrando su creciente popularidad.
Y además de la calidad de vida, el mar y el buen clima, esta elección se debe principalmente a los esfuerzos tanto del sector privado como el público, que se encargan de atraer inversores, talento y crear nuevas propuestas en la ciudad que favorezcan el ecosistema tecnológico.
Por ejemplo, en la capital catalana se celebran eventos tecnológicos internacionales de gran nivel como Smart City Expo World Congress que fomenta el networking y pone a la ciudad como foco de las grandes empresas. También se han creado parques tecnológicos y de innovación, se fomenta el talento tecnológico desde el ámbito educativo y nacen propuestas como Barcelona Tech City, una asociación que apuesta por el ecosistema digital en la ciudad.
Son todos estos esfuerzos que impulsaron en los últimos años un gran aumento en la inversión, que generaron crecimiento en distintos proyectos tecnológicos muy relevantes a nivel europeo. Barcelona es hoy casa de muchas startups reconocidas, unicornios (como Glovo) y empresas tecnológicas de todo tipo.
A pesar de que atraer inversión tecnológica y relacionada a la innovación siempre ha sido importante, sin duda en el último tiempo ha ganado más relevancia por los estragos que deja la Covid-19 en la economía. Este es un momento en donde las nuevas tecnologías son indispensables y seguramente esta necesidad será el motor de muchas nuevas startups a nivel nacional.