Aunque la predicación, de una u otra forma, tiene lugar en entornos seculares, como cuando un entrenador exhorta a sus jugadores a «dedicarse y trabajar duro», se suele pensar en ella como una actividad religiosa. Entonces, ¿qué son las prédicas cristianas y por qué es significativa? A través del siguiente artículo te hablaré sobre el propósito y el valor de la predicación.
¿Por qué se predica?
Es necesario examinar los cuatro términos del Nuevo Testamento (NT) más frecuentemente relacionados con esta actividad para caracterizar la predicación cristiana. Kerusso, el verbo más frecuente, significa «anunciar o proclamar en voz alta». Esta declaración implica la transmisión de un mensaje de un heraldo o mensajero designado, como un rey (secular) o Dios mismo (religioso).
Euangelizo, el segundo verbo más frecuente, es «transmitir o contar buenas noticias», refiriéndose frecuentemente al mensaje cristiano en el Nuevo Testamento. Katangello, el tercer verbo más frecuente, significa «dar a conocer en público» y denota la difusión de un mensaje a una gran audiencia.
Incluso el verbo laleo, que normalmente se refiere a conversar y hablar en general y no a un significado más específico, se traduce como predicar en muchos pasajes (por ejemplo, Hechos 11:19, 13:42 y 14:25). Estos cuatro términos describen colectivamente la predicación como el acto de entregar el mensaje de Dios a todo el pueblo.
¿Por qué es tan importante la predicación?
¿Por qué es crucial que la iglesia escuche y comprenda el mensaje de Dios? La predicación es relevante porque Dios lo exige, por decirlo de manera sencilla. Pablo instó a Timoteo a predicar la palabra como líder pastoral de la iglesia, con el Padre y el Hijo como testigos.
Sin embargo, Pablo proporciona más justificaciones que esto, debido a que en sus instrucciones anteriores a Timoteo, proporcionó una justificación tripartita para compartir el mensaje de Dios: el origen de la Escritura, sus ventajas y su propósito.
El autor de la Escritura
Pablo afirma que «toda la Escritura es inspirada por Dios» en lo que respecta a su origen. Todas las frases, afirmaciones y libros de la Escritura se describen como «inspirados por Dios» según la inspiración, lo que significa que incluyen ideas y palabras propias de Dios. Este hecho, por sí solo, hace necesario transmitir lo que la Biblia enseña de la manera más precisa, amplia y pública posible.
Las ventajas de la Biblia
Al hablar de las ventajas de la Biblia, Pablo afirma que toda ella es útil para «la doctrina, la reprensión, la corrección y la enseñanza de la justicia». La precisión y la validez del mensaje de Dios al articular tanto su naturaleza como su plan para nuestras vidas se denominan doctrina.
La reprobación se refiere a demostrar la existencia del mal y del error, así como su presencia dentro de nosotros y su efecto fuera de nosotros (especialmente a través de falsos instructores), en nuestras vidas. Cuando una persona rechaza los errores que la reprensión revela y abraza la verdad tal como se revela a través de la teología de las Escrituras, se dice que ha sufrido la corrección.
Por lo tanto, la instrucción en la justicia se refiere a una educación y entrenamiento consistente que da como resultado un comportamiento constantemente mejor, haciendo avanzar a una persona desde la inmadurez espiritual hasta la madurez semejante a la de Cristo. Estas ventajas enfatizan aún más la necesidad de difundir el mensaje de Dios tal como se presenta en la Biblia.
El objetivo de la Biblia
Pablo dijo que el objetivo de la Biblia era que el «hombre de Dios» fuera «completo» y completamente equipado para toda buena obra. En otras palabras, la Escritura le da al creyente todo el entendimiento espiritual requerido para cumplir con el destino y propósito que Dios le ha dado. Estas ideas bíblicas serían desconocidas e incumplidas sin la predicación.