Cuando la quiebra es el único camino posible para estas empresas, la Ley Concursal establece una forma de abordar estos casos, cuyo objetivo es salvaguardar la parte patrimonial del negocio y evitar su cierre.
¿Qué es el preconcurso de acreedores?
El sistema más utilizado es el concurso de acreedores, no obstante, hay una opción previa llamada preconcurso, que puede llegar a evitar caer en concurso, con las consecuencias que conlleva éste. Para conocer este paso previo se debe saber en que consiste un preconcurso de acreedores.
El preconcurso es para evitar que se llegue al concurso de acreedores, y debe ser comunicado en los dos meses que siguen al estado de insolvencia del negocio. De acuerdo a la Ley Concursal, este negocio tiene desde ese momento tres meses para poder renegociar sus deudas con los acreedores y poder solucionar el problema de falta de liquidez. En caso de no llegar a los acuerdos previstos, el negocio tiene un mes más para declarar en un Juzgado de lo Mercantil, el concurso de acreedores.
Beneficios del preconcurso que benefician al empresario
El preconcurso no sólo le da oxígeno al empresario, sino que evita que cualquier acreedor, banco, empleados y otros, puedan accionar en contra de él, o pongan en ejecución embargos contra el patrimonio de la empresa. Resumiendo, el preconcurso paraliza las ejecuciones.
Otra de las diferencias notables del preconcurso, es que la empresa puede conservar sus órganos administradores, que en el caso del concurso es reemplazado por un administrador que es nombrado por el juez.
De esta manera, la empresa sigue durante el preconcurso con el control de la administración. También en el caso del preconcurso de acreedores, la empresa no está obligada a hacer público el momento de la crisis, evitando así que la imagen pública de la empresa se vea afectada.
Características y organización del registro concursal
Para las empresas que entran en concurso de acreedores existe un registro concursal, que se llama Registro Público Concursal. Este registro opera desde el primer cuatrimestre del 2014, y lo regula el Real Decreto 892/2013, y puede ser consultado de forma online, depende del Colegio de Registradores de la Propiedad, Mercantiles y de Bienes Muebles de España.
Esta página web siempre se va actualizando, con las empresas que entran en concurso, y también con los distintos cambios procesales de las empresas, concursales o los acuerdos que se puedan llegar a dar de forma extrajudicial. Todos estos cambios figuran cronológicamente en la plataforma, para que pueda ser consultada.
Este registro de empresas en concurso de acreedores o como realmente se llama, Registro Público Concursal, funciona a través de una interfaz muy fácil de utilizar, haciendo clic en la parte superior derecha de la página en la palabra “Buscar”, aparecerá otra pantalla en la que se debe colocar el nombre de la empresa sobre la que se desea conocer la situación procesal, el deudor, o el administrador concursal, o el NIF, DNI, CIF o número de pasaporte. Las consultas sencillas llevan estos procedimientos, pero si se desea una búsqueda más avanzada, se puede introducir la provincia, tribunal o juzgado interviniente, el procedimiento o número de expediente y juez.
El registro de las empresas que están en concurso de acreedores se organiza a través de fichas o carpetas que en sus diferentes campos incluyen la información necesaria, como la de la fecha de resolución, número de expediente concursal, tipo de concurso, que tipo de procedimiento es, la provincia a que corresponde, fecha de publicación, el juzgado al que pertenece y el nombre del juez.
Estas fichas pueden ser visualizadas de forma online o pueden también, ser descargadas en formato PDF. Cada ficha es creada desde una fotocopia escaneada de cada original, y tiene sus correspondientes firmas y sellos.
También la página tiene un área restringida, que solicita para su ingreso, el nombre del usuario y una contraseña. Sólo puede acceder personal autorizado de las Administraciones Públicas y de los órganos jurisdiccionales habilitados, que solicitan información para su recopilación, sobre sentencias que no sean aún firmes.