A todos nos ha pasado, y en más de una ocasión, que hemos sufrido un percance con una cerradura o llaves que nos impida el acceso al hogar. Es muy común que suceda que alguien salga de la casa y deje las llaves y sus respectivas copias adentro, o que abriendo la puerta se le parta la llave y una parte quede dentro del cilindro dejando la cerradura inutilizada, entre muchos otros episodios por el estilo.
La peor opción a la que podemos recurrir en estos casos es buscar a «algún conocido» que tenemos idea que sabe de cerraduras. Esta salida, que pareciera ser la ideal, lo que puede es complicar las cosas y acarrear costes más elevados de lo que necesita la ocasión.
La alternativa ideal es contactar una empresa 24 horas de cerrajeros que estará disponible todos los días del año. Son expertos en el sector que no llegarán al lugar a improvisar soluciones, sino que saben exactamente cómo proceder, ya que han sido formados y se capacitan constantemente, además cuentan con los equipos y herramientas necesarias para realizar un trabajo impecable.
Beneficios de recurrir a profesionales
Una de las principales ventajas que ofrece una empresa de servicios reconocida y profesional es la confianza y seguridad que genera en sus clientes. Los percances muchas veces ocurren en horas de la noche o madrugada, así que puede provocar cierto temor llamar a un desconocido que venga a reparar la avería.
Siendo estas empresas expertas y de trayectoria en el área, se puede tener la certeza de que el personal que enviará a solucionar es confiable, por lo que la familia y los bienes no corren ningún riesgo.
La inmediatez con las que trabajan es otra de las ventajas que tienen las empresas de cerrajería. Siempre hay un alcance, que al ser notificado sobre la necesidad de servicio, rápidamente enviará personal para atender el caso, resolviendo el problema con agilidad.
Los servicios que prestan estas empresas no suelen tener precios exagerados, teniendo en cuenta que se trata de una labor bastante ardua, específica y de mucha dedicación, con el uso de implementos y equipos costosos para su adquisición y mantenimiento.
Amplia variedad de servicios
No sólo en casos de emergencia es oportuno contar con una empresa profesional. Si estamos buscando cambio de cerraduras a buen precio o nos vamos a mudar a una nueva casa y queremos instalar todo un sistema de cerraduras y cerramientos, es importante contar con la asesoría y el trabajo de expertos que podrán recomendar las mejores opciones y llevar a cabo la instalación.
Otros servicios para los que se requieren cerrajeros son amaestramiento de cerraduras y llaves, cambio de bombines, apertura de puertas blindadas y acorazadas, cerrojos de seguridad antirrobo, instalación y reparación de puertas automáticas, persianas metálicas en comercios, puertas basculantes normales y de muelle, tensores de muelle y persianas de hogar con motor.
También tiene la suficiente experiencia y los equipos necesarios para realizar la apertura de cajas fuertes, un trabajo muy delicado que requiere de mucho profesionalismo y, sobre todo, confiabilidad, por tratarse de un elemento de alta seguridad.
Aparte de que se pueden presentar problemas en determinado momento para abrir una caja fuerte, se dan los casos de que se pierdan las llaves o los códigos de los archivos numéricos, o que se haya eliminado de la memoria del dispositivo la combinación empleada para la apertura.
Los cerrajeros profesionales cuentan con las herramientas y equipos adecuados para hacer trabajos limpios y elegantes en cajas fuertes clásicas y tradicionales, pero también las más modernas y de primeras marcas como Cisa, Arfe, FAC, Arregui, BTV, entre otras; es decir, trabajan muy bien con las mejores cajas fuertes del mercado.
No sólo el servicio está orientado al oportuno acceso al hogar, también los cerrajeros profesionales están disponibles y cuentan con los conocimientos necesarios para la apertura de coches.
Es muy común que las personas dejen las llaves dentro del vehículo o simplemente las pierdan. Un buen cerrajero trabajará de la manera más impecable y limpia posible, de tal manera de que la apertura se haga sin causar ningún daño, contrariamente a lo que sucedería si un inexperto se intentase abrir la puerta con un alambre o algún otro artificio con el que causará un gran desastre.