Sin embargo, en ningún lugar es más evidente este avance que en su creciente función como solución de pago alternativa. De hecho, los Smart Contracts son un elemento fundamental para impulsar esta modalidad.
Se trata, esencialmente, de acuerdos automatizados entre el emisor del “documento digital” y el receptor. Una vez realizado, se incorpora a la cadena de bloques, lo que lo hace inmutable e irreversible. Popularizados por la segunda cadena de bloques más conocida del mundo, estos contratos han dado lugar a la serie de aplicaciones disgregadas de la red y a otros casos de uso.
¿Cómo actúan este tipo de contratos?
Haciendo una analogía, se pueden interpretar como un acuerdo digital «si-entonces» entre dos (o más) partes. Si se satisfacen las necesidades de los participantes, entonces el acuerdo puede cumplirse y el contrato se considera consumado.
También es posible describir sus funciones con un simple ejemplo, si una heladería promete la entrega en media hora o, en caso contrario, regresa el dinero. Este negocio establecería entonces un CI con el cliente que hace la solicitud de los helados.
De hecho, el solicitante podría poner los fondos en “garantía” y, si los helados se entregan en media hora, se liberan los fondos de la garantía impuesta. En el caso contrario, los fondos se regresan al origen, el solicitante. Es cierto de que el ejemplo es muy cotidiano y general, pero permite representar de forma simple cómo se pueden utilizar donde se requiera algún tipo de acuerdo garantizado entre las partes.
Por supuesto, lo anterior es un pequeño caso de uso. Los CI pueden programarse para trabajar para grandes operaciones. Por otro lado, también podrían eliminar la necesidad de llevar ciertos desacuerdos a los tribunales, ahorrando tiempo y dinero para los participantes.
Mezclando la eficacia tecnológica con acuerdos digitales
El principio de mantener los fondos en custodia, por ejemplo, está completamente resuelto por los contratos inteligentes (CI) sin necesidad de un marco legal especialmente complicado que requiera honorarios o un agente. Cada parte está protegida por el acuerdo. Si el vendedor no cumple con todos los términos del contrato, la otra parte se queda con sus fondos u otros entregables. Lo mismo ocurre si el comprador no deposita los fondos en la aplicación.
A medida que las criptos ganan en uso y aceptación, esta modalidad no sólo permite un comercio más efectivo y seguro, también con menos obstáculos gracias expertos como la plataforma de trading de bitcoin-profit.app. Las empresas ya se están apresurando a crear soluciones contractuales sencillas para negocios de todas las formas y tamaños.
Contras de los Smart Contracts
Aunque estas nuevas aplicaciones son geniales en su concepto, no son perfectas. En primer lugar, hay que recordar que los CI y las redes de cadenas de bloques se programan a mano. El error humano siempre es posible, y ese error podría dar lugar a “exploits”.
Esto es exactamente lo que ocurrió con el ataque a Ethereum hace más de 5 años. Los hackers utilizaron una vulnerabilidad en el CI de recaudación de fondos y la utilizaron para exponer fondos del proyecto.
Además, existe la falta de claridad regulatoria cuando se trata de estos acuerdos autónomos. Aunque la idea de un proceso de transferencia de dinero seguro y racionalizado suena muy bien sobre el papel, todavía hay que tener en cuenta la fiscalidad y otros aspectos gubernamentales.
Resumen
Luego de repasar las numerosas ventajas funcionales de los CI, estos destacan como una de las mejores innovaciones que acompañan al desarrollo de blockchain. Además de ayudar a las partes, antes desinteresadas en adoptar esta tecnología para diversos usos, las protecciones que ofrecen muestran un escenario en el que todos salen ganando.
Con la aceleración de los esfuerzos de automatización en todo el mundo, este nuevo desarrollo realizará un papel fundamental en muchos sectores. También facilita la reducción de comisiones, acelerando la velocidad de ejecución en cada operación, garantizando el rendimiento y aumentando las protecciones durante el acuerdo establecido.
