Son muchas las razones que pueden provocar que necesitemos un extra de dinero para afrontar determinadas circunstancias, como una avería del coche, un imprevisto con la casa, etcétera. Sea cual sea la situación, a la hora de disponer de dinero rápido con facilidad, la mejor solución al alcance de la mano son los prestamos personales.
Cuentan con la gran ventaja de que se pueden incluso pedir a través de internet en páginas web especializadas, por lo que el proceso es más sencillo todavía. Con un par de clics en un ordenador o un móvil, se pueden hacer las gestiones necesarias para que en un corto período de tiempo se pueda disfrutar del dinero que hemos pedido. Una forma muy fácil de conseguir la cantidad de dinero necesaria y sin tener que pasar por procesos complicados e interminables.
Los diferentes tipos de préstamos que existen
A la hora de pensar en pedir prestamos personales, hay que tener en cuenta que existen diferentes tipos y que varían en función de las necesidades del cliente. Uno de los más demandados por los usuarios son los préstamos con garantía, en los que una hipoteca, un inmueble o un coche pueden ser usados como garantía por parte del cliente. Estos bienes quedarán como aval hasta que el dinero sea devuelto completamente como una forma de garantía de pago.
Otra de las modalidades más interesantes para los clientes son las que aceptan a personas que estén apuntadas en listas de morosidad como ASNEF o RAI. Por ejemplo, los clientes que necesiten préstamos con ASNEF suelen, por lo general, tenerlo más difícil a la hora de encontrar que alguna entidad les vuelva a prestar. Pero a pesar del riesgo, hay empresas que no tienen problema en hacer préstamos figurando en esa lista de morosidad, eso sí, con peores condiciones para el cliente. Lo más normal, es que se le pida al usuario algún tipo de garantía de que va a poder efectuar la devolución completa del dinero como una vivienda o un coche que se tengan en propiedad.
Comparar préstamos a través de internet
Una de las herramientas más útiles cuando se va a pedir un crédito, es utilizar un comparador de prestamos en internet para encontrar la mejor oferta entre ellos, y que se ajusten más a nuestras necesidades personales. Una buena forma de ahorrar tiempo y esfuerzo, ya que la alternativa sería ir buscando en todas las páginas web especializadas en créditos, hasta dar con aquél que queramos.
El comparador de préstamos filtra todas las opciones disponibles en internet en este ámbito, señalando las características principales de cada oferta para que el cliente tenga toda la información para elegir. En especial, hay que prestar atención al período estipulado para la devolución del dinero, los intereses TAE, si aceptan aval, si se puede solicitar en caso de que uno se encuentre en la lista de morosidad, etcétera. Una vez que hemos sopesado bien toda esta información comparativa entre unas empresas y otras, ya estaremos listos para tomar la decisión y pedir el préstamo personal para disponer del dinero requerido cuanto antes.
Todas estas ventajas a la hora de pedir un préstamo, hacen que cada vez más personas se animen a pedir uno cuando se encuentren en una situación en la que necesiten dinero rápido. Se trata de una gran solución con la que cubrir esas emergencias ocasionales de una manera cómoda, sencilla y breve. En un corto período de tiempo se puede estar ya disfrutando del dinero.