El 21 de septiembre de cada año se celebra el día internacional de la Paz, por lo que vamos a conmemorar esta fecha tan importante reflexionando acerca de lo que realmente significa Paz.
Paz
La paz para muchos autores es sinónimo del anhelo, pues ambas se mencionan dentro del mismo contexto. Un ejemplo de ello lo vemos cuando una persona cercana fallece, pues escuchamos a sus familiares decir “que descanse en paz”. O vamos a un ejemplo menos triste, cuando son celebrados los juegos olímpicos escuchamos que realizan la declaración de paz y ponen pausa a todo conflicto armado durante la realización de los juegos.
Este termino también es muy pronunciando en el ámbito político, pues la esperanza de los países es que exista paz y estabilidad en el mundo o regiones, así como que existan condiciones necesarias para que abunde la prosperidad y el crecimiento de la economía. Y dentro de este contexto es que debemos enfocar toda nuestro esfuerzo y atención.
Actualmente se vive falta de paz y estabilidad emocional
Muchas personas de diversas áreas han comentado y hecho eco de que la pandemia del COVID-19 vivida por todos ha causado grandes trastornos en la vida. Debido a que a medidas que las personas se esfuerzan por emerger de las consecuencias, la falta de estabilidad y de paz en el mundo agrava todos los problemas que enfrentamos.
Hoy en día existen muchos conflictos mundiales que han ejercido una presión enorme en las cadenas internacionales de suministro, que van mucho más allá de las consecuencias de pandemia.
Para nadie es un secreto que el comercio internacional se encuentra en una lucha para recuperarse post pandemia, por lo que existe la necesidad de que los mercados se mantengan abiertos y basados en transparencia, seguridad, previsibilidad y cumplimiento de normas. Pero lo más importante, es que para que la economía mundial se recupere debe de existir paz.
La paz no debe ser exclusiva de ciertas organizaciones
La paz debe de incluirse como una condición previa a la participación a los foros multilaterales, pues las declaraciones de paz no deben de verse como una labor que le compete solamente a la ONU o al consejo de seguridad. Mas bien, esta debería de figurar como una condición previa en todos los foros existentes para la mejora de nuestra vida y del bienestar de la población mundial.
Por ello, si los organismos competentes ya no respondes de forma adecuada para el propósito por el que fueron creados entonces todos debemos de participar en su reforma para la obtención de mejores resultados.
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